Beauty Flash Balm de Clarins

Este es uno de mis productos favoritos. Es curioso lo que me pasó con él. La primera vez que lo compré y lo utilicé no me gustó nada, de hecho, por no tirarlo lo utilicé en algunas ocasiones a regañadientes, y se quedó en el cajón del baño durante bastante tiempo. Siempre había tenido ampollas de belleza para ocasiones especiales, y me había  acostumbrado a esa textura, que producía un efecto de estiramiento, sin hidratar. Me venía perfecto para mi piel mixta. Un día a falta de ampollas recurrí al bote olvidado en el cajón, y me llevé una sorpresa. Ahora, olvidados los problemas de grasa, mi piel agradecía esa hidratación extra, y desde entonces no me falta.

Suelo utilizarlo las mañanas que me levanto con aspecto cansado por haber trasnochado, en ocasiones especiales y cuando salgo por la noche después de un día de trabajo.

Es suficiente una cantidad muy pequeña. Hidrata, refresca, tensa (sin sensación de tirantez) e ilumina. Es una buenísima base de maquillaje y el efecto dura horas. Se aplica sin masajear sobre la piel limpia, y ayuda a disimular arrugas y líneas de expresión.

También se puede utilizar como mascarilla desfatigante y reparadora, aplicando una capa gruesa y dejándola actuar durante 10 o 15 minutos.

Creo que es un producto recomendable sobre todo para mujeres de más de 35 años, o para pieles cansadas. En pieles más jóvenes o sin problemas de fatiga no le veo utilidad.

Sus principales ingredientes son:

- Extracto de olivo y de hamamelis: efecto tensor, proporcionan resplandor.

- Extracto de algas: estimula la renovación celular.

- Bisabolol: suavizante, desensibilizante.

- Almidón de arroz: purificante.

Ojo a las alérgicas al olivo, a mi madre cualquier crema con extractos de olivo le provoca alergia y picor.